Y hablando de cuestionamientos... no puedo evitar pensar si no nos estaremos equivocando de raíz.
Por más vueltas que le doy, no entiendo esa manía tan persistente que ha entrado de querer defender la igualdad, insana a mi entender, a toda costa. Entre otras cosas porque no parece que esté funcionando.
Veía hoy en las noticias que en un colegio asturiano leían cuentos pedagógicos para niños de escasos años cuya conclusión era que habían aprendido que "podemos hacer lo que queramos y que todos somos iguales".
Se ve que yo soy muy catastrófica pero más claro no puedo verlo.
¡¡¿¿Cómo vamos a pretender evitar desastres posteriores con esta semilla, que les será repetida indefinidamente??!!
Cuando te repiten años y años que somos iguales, lo más normal es que esperes que efectivamente lo seamos. Y, lo siento por ir en contra del mundo pero, no es así. No vivimos las mismas experiencias, y aún siendo similares o prácticamente las mismas, cada uno las experimenta de una manera muy distinta. No reaccionamos igual, no tenemos los mismos sentimientos ante las mismas situaciones, no pensamos igual y no tenemos las mismas creencias ni las mismas ilusiones, como tampoco las mismas costumbres, ni las mismas carencias, ni las mismas vivencias. No, no somos iguales. Somos muy muy diferentes, muy peculiares, muy únicos e irrepetibles.
Y precisamente en lugar de enseñar, machacar, repetir, y defender sin hartura el derecho a ser diferentes, la obligación de respetar la diferencia, el valor de ser diferentes, la importancia de complementarnos,... no, nos venden desde la tierna infancia que somos iguales.
Pues la lógica no deja de funcionar por más que queramos, pues, "si somos iguales, tú tienes que pensar igual que yo, esperar lo mismo que yo, hacer lo mismo que yo y actuar, esperar y pensar de la forma en que yo espero que lo hagas, que es la mía, porque somos iguales como me han enseñado desde que tenía 3 años". ¿O es que acaso un niño de 3, 4 o 5 años entiende los diferentes matices de la frase "somos iguales", eso de ante la ley, como personas, en valores y derechos...?
Yo no lo tengo tan claro. Y para cuando puedan empezar a entenderlo...quizá ya lo tengan demasiado asumido.
Mi lema es muy diferente precisamente porque somos diferentes y tenemos el derecho a ser diferentes y la obligación de respetar que los demás sean diferentes.
Pero claro...ni es políticamente correcto, ni es lo que se lleva...
Por más vueltas que le doy, no entiendo esa manía tan persistente que ha entrado de querer defender la igualdad, insana a mi entender, a toda costa. Entre otras cosas porque no parece que esté funcionando.
Veía hoy en las noticias que en un colegio asturiano leían cuentos pedagógicos para niños de escasos años cuya conclusión era que habían aprendido que "podemos hacer lo que queramos y que todos somos iguales".
Se ve que yo soy muy catastrófica pero más claro no puedo verlo.
¡¡¿¿Cómo vamos a pretender evitar desastres posteriores con esta semilla, que les será repetida indefinidamente??!!
Cuando te repiten años y años que somos iguales, lo más normal es que esperes que efectivamente lo seamos. Y, lo siento por ir en contra del mundo pero, no es así. No vivimos las mismas experiencias, y aún siendo similares o prácticamente las mismas, cada uno las experimenta de una manera muy distinta. No reaccionamos igual, no tenemos los mismos sentimientos ante las mismas situaciones, no pensamos igual y no tenemos las mismas creencias ni las mismas ilusiones, como tampoco las mismas costumbres, ni las mismas carencias, ni las mismas vivencias. No, no somos iguales. Somos muy muy diferentes, muy peculiares, muy únicos e irrepetibles.
Y precisamente en lugar de enseñar, machacar, repetir, y defender sin hartura el derecho a ser diferentes, la obligación de respetar la diferencia, el valor de ser diferentes, la importancia de complementarnos,... no, nos venden desde la tierna infancia que somos iguales.
Pues la lógica no deja de funcionar por más que queramos, pues, "si somos iguales, tú tienes que pensar igual que yo, esperar lo mismo que yo, hacer lo mismo que yo y actuar, esperar y pensar de la forma en que yo espero que lo hagas, que es la mía, porque somos iguales como me han enseñado desde que tenía 3 años". ¿O es que acaso un niño de 3, 4 o 5 años entiende los diferentes matices de la frase "somos iguales", eso de ante la ley, como personas, en valores y derechos...?
Yo no lo tengo tan claro. Y para cuando puedan empezar a entenderlo...quizá ya lo tengan demasiado asumido.
Mi lema es muy diferente precisamente porque somos diferentes y tenemos el derecho a ser diferentes y la obligación de respetar que los demás sean diferentes.
Pero claro...ni es políticamente correcto, ni es lo que se lleva...